Por: Lauren Pérez Muñoz (estudiante de Periodismo)
Hubo un tiempo que en el pueblo de Falla todo comenzó a perder el color, las paredes desprendían escamas de pintura vieja y el polvo del terraplén se elevaba en remolinos hasta las copas secas de los árboles. Pero hoy, la gente que se aburría de la costumbre, inventa nuevos colores.
Así lo hace Maylié Sánchez Jiménez junto a su familia y amigos, dándole vida a un proyecto textil; que destina una de sus líneas a la confección y distribución, gratuita, de prótesis para mujeres con cáncer de mama.
"Cuando se hace el llamado a emprender proyectos de desarrollo local decido tomar la atelier de Falla en arrendamiento, la cual estaba en desuso desde un tiempo, para mejorar las producciones textiles del municipio Chambas en general. Esa fue mi primera idea y es cómo surge Producción de Confecciones Textiles, con la marca registrada Estilos Maylié.
Entonces ¿cómo surgió el proyecto dedicado a las prótesis?
–Mi mamá es paciente de cáncer de mama. Cuando yo era una niña, ella fue sometida a una mastectomía total, es decir, se quedó sin senos. Desde entonces vengo luchando con ella, porque esta es una patología difícil en las mujeres. Es muy duro a la hora de enfrentar eso como familiar, porque estas pacientes tienen muchos estados de ánimo y afectaciones. Entonces mi mamá siempre tuvo el sueño de hacer algo por las mujeres igual que ella, tratando de traer aquí el proyecto Alas por la Vida que existe en La Habana, pero nunca lo logró.
Así es que quisimos hacer algo parecido en la atelier y diseñamos una prótesis textil con una serie de características especiales. Al proyecto lo llamamos Maryfé, amor y vida, en honor a mi mamá Maryfélix Jiménez Pérez.
¿Cuáles son las ventajas de este tipo de implantes?
–Por ejemplo, te puedes bañar con ellos en la playa, los puedes lavar siempre que quieras, y pasarlo por la secadora, tampoco pesan. Y gracias a que es una esponja evitan las erupciones por calor o rozamiento.
Por otro lado Maylié explica que estas características positivas se contraponen a las prótesis de silicona, que no gozan de mucha popularidad entre las mujeres porque son difíciles de cuidar y usar, "hay que mantenerlas en el refrigerador porque se derriten y pegan, ocasionan quemaduras en las cicatrices sensibles de la operación y a veces se resbalan fuera de los ajustadores".
¿Tienen alguna vía para su distribución?
–Hemos hecho convenios con salud y a través de los consultorios se citan a las mujeres con esta condición y las hacemos venir a la atelier. Donde solemos hacer una pequeña actividad y les entregamos sus prótesis. Cuando ellas vienen es un momento súper emocionante, es bien bonito y se empiezan a sacar los trapitos o esponjitas… lo que ellas mismas se han puesto.
Mientras dice eso, Maylié desprende una inconfundible felicidad, que identifico como el orgullo de poder ayudar a estas mujeres y hacerlas sentirse especiales y bienvenidas en el taller.
Lo lindo del proyecto, continúa, "sería llegarle a todas las pacientes de la provincia y después a todo el país. Porque entre ellas mismas lo han divulgado y de todas partes me llaman mujeres que las necesitan".
Maryfé, amor y vida cuenta con las donaciones de materia prima del pueblo y el respaldo de las organizaciones y empresas del municipio y la provincia:
–"En colaboración con la Federación de Mujeres Cubanas (FMC) recogimos donaciones por los barrios, como ajustadores viejos y trusas. Con la recortería nos apoya la empresa de muebles Lídex. Y tengo la ayuda incondicional del gobierno, de parte de Nora Williams Cabarrocas, que es la representante de los proyectos de desarrollo local".
Una de las experiencias más bonitas para el proyecto fue recibir uno de los premios que otorga el Taller Internacional de Mujeres Empresarias 2023, en La Habana, y, poco después, la visita de Teresa María Amarelle Boué, Secretaria General de la FMC, quién a decir de Maylié manifestó su sensibilidad por esta iniciativa desde que la conoció.
¿Hay algún taller, actividad para insertar a jóvenes y al resto de la comunidad?
– Las trabajadoras de la atelier todas son jóvenes. Dentro de ellas pacientes operadas de oncología que hemos querido rescatar, porque han tenido que dejar su carrera o trabajo y sienten que el mundo se les acaba.
Con el proyecto les damos una segunda oportunidad, donde aprenden manualidades y trabajan. Hoy se sienten útiles. A la misma vez que aprenden algo nuevo mejora su estado de ánimo y ayudan a otras personas. Ese es uno de nuestros objetivos.
"Mucha tela por donde cortar"
Otra de sus ideas a futuro es hacer círculos de interés en las primarias y secundarias, para enseñar manualidades a las niñas y los niños y desarrollar sus capacidades creativas. Tantas metas y alternativas con " mucha tela por donde cortar" es lo que logra la compenetración del trabajo con la localidad. Y lo demuestra a diario su impacto en varios aspectos, como la sustitución de importaciones, la recaudación de divisas y la generación de empleos.
Desde la base de la familia ese impacto se multiplica; porque son los hijos de Maylié, su padre y esposo, los primeros que aprendieron a coser para ayudar en todo lo posible. Por supuesto, el papel de su madre es fundamental por ser la soñadora de la idea y trabajar por cumplir su sueño y el de tantas otras mujeres. Son sin dudas la fe, la esperanza y el amor los pilares que sostienen las iniciativas de desarrollo en la sociedad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario